PATRIMONIO CULTURAL




IGLESIA  NUESTRA SEÑORA  DE LA ASUNCIÓN

Texto y foto/ Wilber Aguilar
Para los ahuachapanecos este templo religioso es indiscutiblemente una estructura impresionante. La iglesia fue construida a principios de la época colonial. Es un lugar de devoción  para la feligresía católica que rinde culto al Dulce Nombre de Jesús. 
Este templo encierra en sus grandes puertas de madera, un estilo arquitectónico que sobresale en todo el territorio nacional. Según su historia,  a pesar de estar sostenida por anchas paredes, el terremoto del 10 de junio de 1982, ocasionó serios daños a la infraestructura, lo que hizo pensar a muchos en su demolición.
Con todo, de que un grupo de entusiastas ahuachapanecos se constituyó un comité el día 1 de abril de 1986 al que llamaron “Pro-Restauración”, consiguiéndose salvar lo que ahora constituye un representativo patrimonio cultural de la nación.
En las anchas paredes de la iglesia de La Asunción predomina el color blanco, lo que para muchos refleja la paz y la tranquilidad que se vive en su interior; su estilo arquitectónico está influenciado por el barroco  con mezcla de algunos elementos del neogótico, en sus fachadas se observan elementos decorativos en relieve.
Para quienes no saben, en la iglesia  se encuentran los restos del presbítero, doctor y licenciado Isidro Menéndez (1795-1858), a quien se le conoce como el padre de la legislación salvadoreña, fundador en el convento de este templo, en 1853 y de la primera escuela de Derecho a nivel centroamericano. Otro hecho importante en esta iglesia es que en 1830, recibió las aguas bautismales el ex Presidente de la República y gran impulsor de la cultura nacional, General Francisco Menéndez.
La iglesia tiene un estilo colonial, con gruesas paredes de calicanto, techumbre de teja y amplio atrio. Puedes visitarla con toda tu familia o amigos. Se encuentra frente al parque La Concordia en el centro histórico de la ciudad, contiguo al pasaje La Concordia.


ARCO DURÁN


El imponente Arco Durán a la entrada del Llano El Espino.
Texto y fotos/ Wilber Aguilar

Fue  Dámaso Aguilar el encargado de dirigir  la construcción  del famoso "Arco Durán" a petición de don Onofre Durán, El Arco Durán se construyó sobre la Calle de Riego, actualmente  Avenida Durán, mejor conocida como la "Calle Vieja" saliendo de Ahuachapán hacia Las Chinamas, carretera a Guatemala.

Se sabe que don Onofre Durán, fue un miembro ilustre de la élite que fungió como vicepresidente durante el período de Manuel  Enrique Araujo (1911-1913). Durán le concedió a la “Ciudad de Los Ausoles” contar con un monumento símbolo a la comunidad de Ahuachapán: El Arco Durán (1870).

 El monumento es una réplica de El Arco del Triunfo de París, Francia  (Arc de Triomphe, en francés)  que es uno de los arcos de triunfo más famosos del mundo. El Arco de Triunfo está ubicado en la plaza Charles de Gaulle, en el extremo Oeste de la avenida Champs-Élysées. Antiguamente, el nombre de la plaza era Place de l’Étoile. La historia cuenta que Napoleón cambió de idea en el último momento a la hora de realizar un monumento en la Plaza de la Estrella (Place de l´Étoile), ya que en un principio el monumento que se iba  a construir era un elefante de más de 50 metros que arrojase agua por la trompa.

El Arco del Triunfo forma parte de los monumentos nacionales que poseen una fuerte carga histórica en Francia. A sus pies se encuentra la Tumba al Soldado Desconocido de la Primera Guerra Mundial, en cuya superficie hay una inscripción: ICI REPOSE UN SOLDAT FRANÇAIS MORT POUR LA PATRIE 1914-1918 («Aquí yace un soldado francés muerto por la Patria 1914–1918») y una llama continuamente encendida que las asociaciones de antiguos combatientes o de víctimas de guerras reavivan todos los días a las seis y media de la tarde, conmemorando su recuerdo que es revivido cada 11 de noviembre, aniversario del armisticio firmado en 1918 entre Francia y Alemania que puso fin a la Primera Guerra Mundial.

Además, la historia narra que Napoleón Bonaparte decidió construir este arco tras su victoria en la Batalla de Austerlitz (1805), tras prometer a sus hombres: «Volveréis a casa bajo arcos triunfales». Es un monumento neoclásico encargado por Napoleón Bonaparte en 1806, para conmemorar el triunfo militar en la batalla de Austerlitz de 1805. El Arco de Triunfo fue diseñado por Jean-Francois Chalgrin, tiene una altura de 51 metros y un ancho de 45. Su construcción completa finalizó en la década de 1830.




PLAZA Y PASAJE LA CONCORDIA



Texto y fotos/ Wilber Aguilar

Nuevo punto de la ciudad, el "Pasaje La Concordia". Contiguo a la Iglesia “La Asunción”. El Pasaje fue recientemente rescatado y remodelado por la Alcaldía de la localidad, siendo una hermosa área peatonal con preciosos y coloridos murales, una bellísima fuente luminosa que hace las delicias de las familias que desean descansar.
En el pasaje, es común ver a personas de la tercera edad platicando sobre diversos temas de actualidad o simplemente se reúnen para recordar su pasado en la ciudad que definitivamente ha cambiado. En ocasiones, esas conversaciones del ayer se ven interrumpidas por “pelotazos” de los niños que disfrutan jugar el deporte rey. Otros niños aprovechan para jugar “ladrones y policías”, “congelados”, entre otros.
Al caer la tarde, la presencia juvenil se hace notoria. Estudiantes de los centros educativos aledaños se cruzan por el lugar para relajarse un poco. Algunos aprovechan para tomarse unas fotografías, otros prefieren comprar unos bocadillos y degustarlos sentados en los asientos del pasaje. Entrada la noche, las luces iluminan el lugar dándole una vistosidad impresionante. La fuente y la estructura teatral, escenario de diversos eventos, se iluminan con colores rojo, verde, azul, naranja y amarillo.
Tanto de día como de noche, el pasaje es ideal para disfrutar un paseo con la familia, con los amigos, con la pareja o con los vecinos.    



GIMNASIO LOS PINITOS
Texto y fotos/ Wilber Aguilar
 
Hoy en día, quienes gustan de practicar deportes cuentan con varios lugares de sano entretenimiento. Uno de ellos es el Gimnasio Los Pinitos, el cual fue inaugurado el 29 de octubre de 2005 por el alcalde ahuachapaneco Rafael Antonio Morán Orellana.
El local cuenta con una cancha de basketball que a la vez, se puede ocupar para cancha de fútbol sala. La iluminación es totalmente apropiada con lámparas especiales. Cuenta además, con servicios múltiples donde se encuentran los camerinos con duchas y servicios sanitarios. 
El horario de atención para toda la comunidad es de  6:00 am a12:30 md y de 2:00 pm a 11:00 pm. Aquí se desarrollan diferentes torneos deportivos en diferentes categorías y para ambos sexos. Además, se desarrollan eventos sociales, culturales y religiosos. También, al lugar llegan alumnos de centros educativos para recibir allí educación física. Otros en cambio, lo toman como punto de reunión para disfrutar de los torneos o para jugar un “partidito” con los amigos.




PLAZA LOS PINITOS

Texto y fotos/ Wilber Aguilar
Esta plaza fue construida en el mismo tiempo que fue erigido el Gimnasio Los Pinitos. Es ideal para pasear con la familia los fines de semana o si prefiere, cualquier día. Está ubicada enfrente del Gimnasio. Cuenta con una fuente y bonitos jardines donde puede tomarse muchas fotografías con la familia, compañeros de estudio o trabajo, amigos, con la novia o el novio. 











PLAZA DE LA BANDERA
Texto y fotos/ Wilber Aguilar
Contiguo al Gimnasio Los Pinitos se encuentra esta plaza. Su nombre hace referencia a la bandera nacional que se eleva en el lugar. Es una plaza que cuenta con una diversidad de plantas que la hacen lucir atractiva. A su alrededor se encuentran ubicados asientos para un cómodo descanso.
Allí se encuentran monumentos en los cuales hay placas de honor que describen lo siguiente:
 “El estudiantado universitario en nombre del pueblo salvadoreño erige este monumento a la memoria a los héroes que el 12 de diciembre de 1944, lucharon y murieron defendiendo la libertad y el honor de la patria.- A.G.E.U.S. Ahuachapán. XXII –XXII”.
 “Monumento remodelado por el Consejo Municipal presidido por el Dr.  Luis Antonio Cortez Arévalo, periodo 2000-2003. Como una contribución para perpetuar y resaltar la gesta gloriosa de los mártires del ´44, cuyo ejemplo sirva para mantener vivos los ideales de libertad y espíritu revolucionario de nuestro pueblo. Ahuachapán, 7 de septiembre de 2001.”
“Monumento nacional en memoria de la jornada del 12 de diciembre de 1944 para que sirva de inspiración a las futuras generaciones. Ahuachapán, 12 de diciembre de 1974. Consejo Municipal.”  




UN HISTÓRICO EDIFICIO
Texto y foto/ Wilber Aguilar
El local que ahora ocupa el Centro Escolar Isidro Menéndez fue declarado Monumento Histórico Nacional por el Consejo Nacional  para la Cultura y el Arte (CONCULTURA).
El plantel educativo lleva el nombre del Presbítero y Doctor Isidro Menéndez, a cuya singular inteligencia y maduro criterio, debe el Salvador sus primeras leyes promulgadas para contar con ordenamiento jurídico propio. El edificio se encuentra ubicado frente al parque La Concordia, en el centro histórico de la ciudad. Su infraestructura corresponde a un sistema francés llamado “ployé”, el cual es antisísmico. No lleva ladrillo, sino que está compuesto de una malla metálica cubierta de cemento.
El local se declaró inhabilitado  a consecuencia del terremoto  del 13 de enero de 2001. Pero eso no es todo, antes del sismo el lugar ya estaba deteriorado y se gestionaba la probabilidad de reconstruirlo. Debido al peligro que se corría en el centro educativo, las autoridades del Ministerio de Educación (MINED) autorizaron al entonces director, Arturo Cordero, para que buscara un sitio apropiado y seguro  para alojar a centenares de niños y jóvenes que ya estaban matriculados.
Luego del desalojo, las instalaciones fueron visitadas por ingenieros y miembros de la Comisión Evaluadora de Daños del MINED, autoridades municipales y del Fondo de Inversión Social para el Desarrollo Local (FISDL) para determinar si la infraestructura se reparaba o se reconstruía. Finalmente, se decidió remodelarlo.  La remodelación del mismo incluyó la construcción de nuevas aulas, el techado de la cancha, cielo falso nuevo, mesas de cemento en los pasillos externos y juegos mecánicos.
ECOS DE LA HISTORIA  
En 1857, cuando Isidro Menéndez desempeñaba el curato en la ciudad ahuachapaneca, las instalaciones albergaron el Convento donde vivió Menéndez. Tiempo más tarde, el Convento se convirtió en el Colegio de Abogados o Facultad de Jurisprudencia, dirigido por Menéndez quien ejerció la carrera de Derecho. Después, se convirtió en el Cuartel del Séptimo Regimiento de Infantería. Las diferencias políticas regionales provocaron que soldados guatemaltecos, enviados por el dictador Rafael Carrera, incendiaran el local. Sin embargo, aquel incendio no lo redujo a cenizas pues se logró apagar el fuego.
A raíz de estos sucesos, el proceso de reconstrucción inició durante la administración del Presidente en turno Alfonso Quiñones Molina, quien apoyó directamente en esta ardua tarea. El proyecto se demoró un poco más de lo planeado, pues se concluyó durante el mandato del Presidente Pío Romero Bosque en 1930.










LOS AUSOLES DE AHUACHAPÁN

 Texto / Wilber Aguilar

Turísticamente,  son una de las referencias más conocidas de la ciudad. Es más, Ahuachapán se conoce como la “Ciudad de Los Ausoles”. Sí,  en las afueras de Ahuachapán, en un área de  aproximadamente 20 Km cuadrados se encuentran los ausoles o fumarolas del mismo nombre que, según expertos, constituyen uno de los fenómenos más interesantes e importantes del volcanismo en Centroamérica.

La ubicación de los ausoles es variada, pues se encuentran en los cantones Los Magueyes, El Barro, Tacubita, Chipilapa y Suntecumas.
Otros datos importantes es que fueron descubiertos por el español García de Polanco en 1576, y el escritor mexicano José Vasconcelos los llamó “las antesalas del infierno”.
Los principales ausoles  son los siguientes:
1.           El zapote que mide 5 Kms. Antiguamente era un cráter de 20 m. de diámetro.
2.           Valdivieso de 400 mts. formado por cuatro aberturas grandes y varias pequeñas con hermosos cristales de azufre
3.           El barreal, formado por estanques de lodo
4.           La labor, consiste en una hondonada de 200 mts. de diámetro y paredes cortadas verticalmente a manera de cráter, con siete aberturas que emanan vapores con mucha fuerza y ruido, volcancillos de arcillas y lodo de 2 mts. de altura
5.           El salitre, un conjunto de lagunitas de aguas muy calientes 960º que dan origen al río Agua Caliente, que después hace un recorrido de 13 Km. y desagua al margen izquierdo del río Paz.
Ahuachapán es también conocida como la “Capital Geotérmica” de Centro América, ya que en 1968 se comenzó a aprovechar este tipo de energía producida por estos recursos naturales.
Como bien se sabe, la energía geotérmica utiliza el calor interno de la tierra o del subsuelo que sube en forma de vapor a la superficie. La riqueza eléctrica que se obtiene de este valioso mineral es de gran importancia para el territorio salvadoreño, siendo así un orgullo ahuachapaneco. Para visitar los ausoles, ya sea solo/a o en compañía de alguien, en caminata o en transporte, debes seguir la calle que conduce hacia la planta geotérmica que está al Este de la plaza El Amatillo.
 


2 comentarios:

  1. Me encanta la historia del CEIM ya q es poco mencionada apesar de su gran reelevancia deberiamos de estudiarla ya que es muy importante

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  2. ES VERDAD. EL LOCAL DEL ISIDRO MENENDEZ ENCIERRA MUCHAS HISTORIAS QUE ENRIQUECEN NUESTRA CIUDAD.

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